Una tarde lluviosa, el mono Krah y el sapo Raong se sentaron bajo el tronco de un árbol y se quejaron del frío.
—Kr-r-r-h—, espetó Krah;
—Chut-toot-toot—, croó el sapo.
Juntos, acordaron talar un árbol al día siguiente y hacer una chaqueta abrigada con la corteza. Pero por la mañana el sol brillaba tan fuerte, cálido y hermoso que Krah se divirtió en las copas de los árboles, mientras Raong trepaba al tronco y se bañaba en el sol. De repente Krah bajó desde arriba y gritó:
—¡Hola! ¡Raong! ¿Cómo estás?
—Oh, excelente—, respondió Raong.
—Dime, ¿no queríamos hacernos una chaqueta?—, preguntó Krah.
—¡Oh qué! ¡Al diablo con la chaqueta!— respondió Raong, —hagámosla mañana, ahora me siento acalorado y estoy disfrutando del sol.
Y estuvieron felices por el sol durante todo el día.
Por la tarde empezó a llover de nuevo. Los dos volvieron a sentarse bajo el tronco del árbol y se quejaron del frío.
—Kr-r-r-h—, siseó el mono;
—Tut-tut-tut—, gruñó Raong.
Y nuevamente acordaron talar un árbol al día siguiente y hacer una chaqueta abrigada con la corteza. Por la mañana, el sol volvió a brillar tan fuerte, cálido y hermoso que Krah se divirtió en las copas de los árboles mientras Raong se bañaba bajo el sol. Raong volvió a decir:
—¡Dios mío! ¡Al diablo con la chaqueta! Hagámoslo mañana.
El mismo espectáculo ocurría todos los días, y ha seguido siendo así hasta el día de hoy, y Krah y Raong todavía están sentados bajo la lluvia, quejándose del frío y gimiendo «Kr-r-r-h» y «Hut -tut-tut».
Cuento popular malayo, recopilado por Pablo Hambruch (1882-1933) en Malaiische Märchen aus Madagaskar und Insulinde, 1922
Paul Hambruch (1882 – 1933) fue un etnólogo y folclorista alemán.
Realizó recopilaciones de cuentos de hadas de los mares del sus de Australia, Nueva Guinea, Fiji, Carolinas, Samoa, Tonga Hawaii, Nueva Zelanda, Malayos, Madagascar e Insulindia