Había una vez en una aldea un Gallo, que recibió una invitación de otro Gallo, primo suyo, para asistir a sus bodas. El Gallo se levantó muy temprano, se acicaló y vistió convenientemente y emprendió el viaje, olvidando tomar el desayuno.
En el camino encontró una boñiga de vaca, toda llena de granos de trigo sin digerir; y aquí vinieron los apuros de mi buen Gallo, que empezó a decir entre sí:
—¿Qué haré? picaré o no picaré? si pico, me mancho el pico, y si no, me muero de hambre.
Así estuvo meditando por algún rato y mirando los granos de trigo, hasta que cayó en la tentación y se dió un buen hartazgo.
Siguió su camino y a poco andar encontró una mata de Malva y le dijo:
—Malva, límpiame el pico, que voy a la boda de mi primo Juan Periquito.
La Malva dijo:
—No quiero.
Más adelante encontró a una Oveja y le dijo:
—Oveja, come a Malva, que Malva no quiso limpiarme el pico, que voy a la boda de mi primo Juan Periquito.
La Oveja dijo:
—No quiero.
Siguió andando y más adelante encontró a un Lobo y le dijo:
—Lobo, come a Oveja, que Oveja no quiso comer a Malva, que Malva no quiso limpiarme el pico, que voy a la boda de mi primo Juan Periquito.
El Lobo dijo:
—No quiero.
Siguió el Gallo su camino y más adelante encontró a un Perro y le dijo:
—Perro, mata a Lobo, que Lobo no quiso comer a Oveja, que Oveja no quiso comer a Malva, que Malva no quiso limpiarme el pico, que voy a la boda de mi primo Juan Periquito.
El Perro dijo:
—No quiero.
A poco andar encontró el Gallo a un Palo y le dijo:
—Palo, apalea a Perro, que Perro no quiso matar a Lobo, que Lobo no quiso comer a Oveja, que Oveja no quiso comer a Malva, que Malva no quiso limpiarme el pico, que voy a la boda de mi primo Juan Periquito.
El Palo dijo:
—No quiero.
Anduvo el Gallo un rato más y se encontró con un Fuego y le dijo:
—Fuego, quema a Palo, que Palo no quiso pegar a Perro, que Perro no quiso matar a Lobo, que Lobo no quiso comer a Oveja, que Oveja no quiso comer a Malva, que Malva no quiso limpiarme el pico, que voy a la boda de mi primo Juan Periquito.
El Fuego dijo:
—No quiero.
Más adelante encontró el Gallo al Agua y le dijo:
—Agua, apaga a Fuego, que Fuego no quiso quemar a Palo, que Palo no quiso pegar a Perro, que Perro no quiso matar a Lobo, que Lobo no quiso comer a Oveja, que Oveja no quiso comer a Malva, que Malva no quiso limpiarme el pico, que voy a la boda de mi primo Juan Periquito.
El Agua dijo:
—No quiero.
Siguió andando el Gallo y más adelante encontró a un Burro, y le dijo:
—Burro, bébete a Agua, que Agua no quiso apagar a Fuego, que Fuego no quiso quemar a Palo, que Palo no quiso pegar a Perro, que Perro no quiso matar a Lobo, que Lobo no quiso comer a Oveja, que Oveja no quiso comer a Malva, que Malva no quiso limpiarme el pico, que voy a la boda de mi primo Juan Periquito.
Aquí se suspende el cuento y se habla de cualquiera otra cosa. De pronto se dice:—«¿Dónde llegaba? ¿al Palo? ¿al Fuego?»; y cuando contesta alguno:—«Al Burro», se le dice:—«Alzale la cola y bésale el c…»
EL GALLITO (Cuento de pega) (Dictado en 1911 por don Victoriano de Castro, español, de 55 años. Lo oyó contar en Belver de los Montes, provincia de Zaragoza, donde el cuento era muy popular, cuando él era niño) Cuento popular chileno, recopilado por Ramón A. Laval (1862 – 1929)
Ramón Laval Alvial (1862 – 1929) fue un escritor y folclorista chileno