serpiente

La Tortuga, la Rana y la Serpiente

Animales
Cuentos con animales
Sabiduría
Cuentos con Sabiduría
Fábulas podcast conmoraleja
Fábulas
Cuento Berebere – La Tortuga, la Rana y la Serpiente
Loading
/

Video con cuento Berebere – La tortuga, la rana y la serpiente

Cuento completo berebere original – La tortuga, la rana y la serpiente

Erase una vez una tortuga que se casó con una rana. Un día se pelearon. La rana escapó y se metió en un agujero. La tortuga estaba preocupada y se paró frente a su puerta muy preocupada. En aquellos días los animales hablaban. El grifo se acercó y dijo:

—¿Qué te pasa? Pareces preocupado esta mañana.

—Nada me aflige—, respondió la tortuga, —excepto que la rana me ha abandonado.

El grifo respondió:

—Lo traeré de vuelta.

—Me harás un gran favor.

El grifo retomó su camino, llegó al agujero de la rana y arañó la puerta.

La rana lo escuchó y preguntó:

—¿Quién se atreve a tocar la puerta de la hija de un rey?

—Soy yo, el grifo, hijo de grifo, quien no deja escapar ninguna carroña.

—Sal de aquí, regresa entre tus cadáveres. Yo, hija del Rey, no iré contigo.

El grifo se marchó inmediatamente.

Al día siguiente, el buitre pasó junto a la tortuga y la encontró preocupada delante de su puerta y le preguntó qué le pasaba. Él respondió:

—La rana se ha ido.

—La traeré de vuelta—, dijo el buitre.

—Me harás un gran favor.

El buitre se sobresaltó, y al llegar a la casa de la rana empezó a batir sus alas.

La rana dijo:

—¿Quién viene a oriente para hacer ruido en la casa de la hija de los reyes, y no la deja dormir tranquila?

—Soy yo, el buitre, hijo de buitre, quien le roba los polluelos a su madre.

La rana respondió:

—Aléjate de aquí, padre del muladar. Tú no eres quien para conducir a la hija de un rey.

El buitre se enojó y se fue muy perturbado. Regresó con la tortuga y le dijo:

—La rana se niega a volver conmigo. Busca a alguien más que pueda entrar en su agujero y hacerla salir. Entonces la traeré de vuelta aunque no quiera caminar.

La tortuga fue a buscar a la serpiente, y cuando la encontró se puso a llorar.

—Yo soy quien la haré salir—, dijo la serpiente. Rápidamente se acercó al agujero de la rana y rascó la puerta.

—¿Quién viene a llamar a mi puerta?— preguntó la rana.

—Soy yo, la serpiente, hijo de la serpiente. Sal o entro.

—Espera un momento hasta que me ponga mis mejores ropas, me ciña la faja, me frote los labios con cáscaras de nueces, me ponga un poco de koheul en los ojos; entonces iré contigo.

—Date prisa— dijo la serpiente. Luego esperó un rato. Finalmente se enojó, entró en su casa y se la tragó. Desde entonces la serpiente ha estado en guerra con la rana. Cada vez que ve una, la persigue y se la come.

Cuento anónimo popular berebere editado en 1901 René Basset en Moorish Literature

libro de cuentos

Los cuentos populares, las leyendas, las fábulas, la mitología…, son del pueblo.

Son narraciones que se han mantenidos vivas transmitiéndose oralmente, por las mismas personas del pueblo. Por ello no tienen dueño, sino que pertenecen a las gentes, a la folclore, a las distintas culturas, a todos.

En algún momento, alguien las escribe y las registra, a veces transformándolas, a veces las mantiene intactas, hasta ese momento, son voces, palabras, consejos, cosas que «decía mi abuelo que le contaba su madre…»

Utilizamos cookies para mejorar su experiencia de navegación, ofrecer anuncios o contenido personalizados y analizar nuestro tráfico. Al hacer clic en "Aceptar", acepta nuestro uso de cookies. Pinche el enlace para mayor información.política de cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies
Scroll al inicio