Momotaro

Momotarō, el niño Melocotón

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Cuento narrado: Momotaro, el niño melocotón

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Momotaro, el niño melocotón
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Cuento completo: Momotaro, el niño melocotón

Cuenta la leyenda, que hace mucho, mucho tiempo, en una vieja aldea, vivían un anciano y una anciana que no podían tener hijos y cada día rezaban a los dioses para que le concedieran uno.

Un día, mientras el anciano recogía leña en la montaña, la anciana fue a lavar ropa en la orilla del rio. Mientras lavaba la ropa, la anciana vio flotar un gran melocotón en el río: el melocotón más grande que había visto en su vida.

La anciana, muy contenta tomó el melocotón del río y lo llevó a su casa para comerlo en la cena junto al anciano.

En la casa, el anciano tomó un cuchillo para cortarlo, pero antes de hacerlo, el mismo melocotón se abrió en dos partes y del centro, salió un precioso niño.

Los ancianos comprendieron que los dioses les enviaban aquel hijo que tanto estaban esperando.

—Naciste de un momo (melocotón) — dijo el anciano — te llamaremos Momotarō.

Y desde aquel día, criaron aquel niño como su hijo.

Los años pasaron, y Momotarō se convirtió en un muchacho fuerte y valiente. Un día, Momotarō sintió el deseo de retribuir a sus padres tanto como le habían dado, y decidió ir a pelear con los ogros que con frecuencia robaban y atacaban a los aldeanos.

—Padres —, dijo Momotarō —, voy a ir a la isla de los ogros, a recuperar todos los tesoros que saquearon de los aldeanos.

Los ancianos, muy orgullos de su hijo, le proporcionaron todo lo necesario para ir: una espada, una armadura y alimentos para el viaje.

Cuando Momotarō comenzó su viaje hasta la isla de los ogros, un perro se cruzó en su camino y le dijo:

—Si me das de comer un kibi dango, te ayudaré a vencer a los ogros.

Más tarde se encontraron con un mono, y este le dijo a Momotarō:

—Si me das de comer un kibi dango, te acompaño para vencer a los ogros.

Y por último se sumó un faisán.

—Si me das un kibi dango yo también te acompaño a la isla de los ogros para vencerlos —, dijo el faisán.

Momotaro
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Momotarō les proporciono los alimentos a los tres animales que decidieron acompañarlo, y juntos construyeron una barca para cruzar el mar. Juntos se subieron a la barca y zarparon hasta llegar a la isla de los ogros.

Cuando vieron a los ogros, estaban haciendo un gran banquete con todo lo que habían robado a los aldeanos, por lo que decidieron esperar a que se durmieran. Borrachos, los ogros no tardaron en caer en un sueño profundo y en ese momento Momotarō y sus amigos se lanzaron contra ellos: Momotarō con su espada, el perro mordiéndoles, el mono golpeándoles y el faisán sacándoles los ojos.

Pronto los ogros estaban tan aturdidos y habían recibido tantos golpes, que se rindieron y entregaron todos los tesoros robados a los aldeanos. Los ogros, arrepentidos prometieron no volver a saquear.

Momotarō con la ayuda de los animales rescató todo los tesoros, los subieron a la barca, y los devolvieron a sus dueños.

Luego regresaron a su casa con los ancianos, donde vivieron felices y en abundancia.

Cuento leyenda popular japonesa, recopilada por Andrew Lang

Andrew Lang (1844-1912)

Andrew Lang (1844-1912) fue un escritor escocés.

Crítico, folclorista, biógrafo y traductor.

Influyó en la literatura a finales del s XIX e inspiró a otros escritores con sus obras. Hoy se le recuerda principalmente por sus compilaciones de cuentos de hadas del folclore británico.

Sobresalen sus compilaciones: El libro azul de las hadas, El libro rojo de las hadas, El libro verde de las hadas, El libro amarillo y carmesí de las hadas, El Anillo Mágico y Otras Historias, etc.

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